miércoles, 29 de enero de 2014

Poema: 'El mal poema'


Llega tembloroso,
pide perdón por ser,
juega a las cartas
con el azar de un buen adjetivo,
esa palabra, y no otra,
bajo la luz rojiza del misterio
como bulevar apagado.
Otros vivieron antes,
dejaron su rastro
de ceniza y tristeza,
grandes nombres
y grandes palabras
de los que no queda
ni el eco de un modesto
propósito.
Dejad pasar al mal poema:
no todos pueden decir lo mismo.
Antes de que la tinta se borre,
resucita bajo los ojos oxidados
de algún incauto,
persigue estrellas y encuentra
vasos rotos,
electricidad bajo la lluvia,
una tubería rota,
aquel desconchón en la pared,
el mando a distancia de la tristeza,
un traje de carnaval con vals
de fondo.
Ya está aquí, ¿no lo veis?
Quería ser hombre
y solo fue un mal poema.

miércoles, 8 de enero de 2014

Poema: 'El lector'


¿Quién te pide,
en horas hurtadas al descanso,
buscar cifra exacta de tristeza,
amarga razón de felicidad?
Quieres ser hombre,
pero para eso te faltan palabras,
demasiadas palabras.
Y ni siquiera estos libros preludian
la sed y su ausencia,
el sol crepuscular en los cristales
apagados,
el retén de pronombres en llamas
que es algo más que una oración
de relativo.
Dentro de todas las cosas,
cuando ya no queda ni su nombre,
ni el recuerdo de su nombre,
apenas un quizás.
Por eso, solo por eso
llegan las estatuas en falupas
y Ulises es un encantador de adolescentes
que aún creen en el amor.
Suena el timbre y la página
-¡oh, maravilla!-
sigue en blanco.
El joven lee en aquel rincón
donde dan la vuelta
los vientos australes.
La vida es un paraíso,
pero los hombres se esfuerzan
en no comprenderlo.
Lo dijo Dostoievski.
Sus labios
–esquirla de luz derramada-
ya no son suyos.